lunes, 25 de julio de 2016

Mauro Libi Crestani El deporte debe ser una política dentro de su empresa para hacerla saludable

Avelina es aliada del deporte venezolano



El sedentarismo se ha convertido en un problema en nuestros tiempos. De ello no escapan las empresas o emprendimientos que demandan el que sus trabajadores deban pasar muchas horas sentados frente a sus computadores o actividades que exigen poco movimiento o desplazamiento. 

En tal sentido hay que tomar cartas en el asunto.
Las organizaciones, especialmente las que son o aspiran a ser HERO’s (Healthy & Resilent Organizations), es mucho lo que pueden hacer al respecto, bien en lo individual, lo grupal, como lo organizacional. 

No se puede ser una organización saludable si no se cuenta con empleados saludables. 

El vigor, la energía y el entusiasmo deben ser parte vital de su empresa.
Sin que todos los trabajadores tengan que ser atléticos, es posible tomar acciones concretas para fomentar y apoyar hábitos saludables como el deporte y el ejercicio entre los miembros de la organización. 

Científicamente se ha establecido que el deporte tiene efectos benéficos en el sueño, para la liberación de endorfinas que potencian de forma natural el positivismo y el entusiasmo. Igualmente el ejercicio libera serotonina, adrenalina y dopamina, que de manera conjunta estimulan el bienestar. El ejercicio y el deporte disminuyen el estrés, mejoran el metabolismo y dan energía para enfrentar los retos de la jornada laboral.

En tal sentido, las organizaciones pueden y deben implementar políticas que estimulen estas actividades entre sus trabajadores, tal como la flexibilidad laboral, el teletrabajo, los espacios deportivos en las empresas, inversión en equipos y clubes deportivos, entre otras.

Esto propicia una mejor relación vida laboral-vida privada que es vital para desarrollar confianza organizacional y resultados organizacionales saludables en términos de retorno de la inversión. 

El apoyo a los grupos deportivos entre los trabajadores tiene un efecto de contagio emocional y de actitudes.

La actitud y comportamiento del liderazgo empresarial en este sentido es muy importante, al tiempo que fomenta la cohesión y confianza organizacional. 


Este debe ser un esfuerzo constante, pues con las limitaciones de tiempo actual, es posible que se abandonen con facilidad estas actividades. Por tanto, su departamento de recursos humanos tiene un papel importante para hacer de esto una política permanente. El deporte debe convertirse en rutina dentro de su empresa. Recuerde, ello es vital para la salud, suya, de sus trabajadores y de su organización.

Sigueme @maurolibi12

jueves, 21 de julio de 2016

Mauro Libi Crestani: Tipos de emprendedores y sus características


Por Mauro Libi. Hemos visto que un emprendedor es una persona con la capacidad de identificar las oportunidades y aprovecharlas para convertirse en el protagonista de abanderarlas. El emprendedor visualiza el negocio en el entorno y asume el reto de organizar los recursos para poner en marcha la empresa o proyecto.

Pero no existe un único tipo de emprendedor, hay varios perfiles entre los cuales hay permeabilidad, pues una persona puede poseer aspectos de uno u otro tipo.

Sin embargo, a manera de orientación hablaremos de ocho tipos de emprendedores que se han definido.

El emprendedor visionario es quien se visualiza a futuro y se adelanta a las tendencias del momento. Este tipo de emprendedor trae a la realidad actual negocios en áreas que serán clave en el futuro.

El emprendedor inversionista es aquel que quiere hacer crecer sus rentas con negocios novedosos. 

El emprendedor especialista es quien desde una perspectiva técnica aborda los negocios o proyectos.

Entretanto, el emprendedor persuasivo es quien se ubica como abanderado de un proyecto, quien toma la batuta, y se propone darlo a conocer y a convencer a otros para que se sumen. Más que desarrollar los proyectos, los lidera y se encarga de mantener la cohesión en el equipo de trabajo.

El emprendedor intuitivo “huele” dónde están los negocios, los intuye. Es un empresario nato. Es apasionado de los negocios.



El emprendedor-empresario conoce del mundo empresarial, no es novedad para él. Asume los riesgos pero se diferencia del intuitivo y del visionario, pues se enfila hacia la consolidación de los proyectos. 

El emprendedor-oportunista es quien al percibir una oportunidad, sin más, se lanza a su realización. Detecta las oportunidades de negocio y sabe los pasos que debe seguir. Tiene conocimientos del mercado, de sus claves y las explota.

El emprendedor-vocacional está presente en todos los demás perfiles. Lo más seguro es que cuando alcance el objetivo de posicionar el producto o servicio, lo deje en manos de otro y se dirija hacia nuevos derroteros.


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lunes, 18 de julio de 2016

Mauro Libi Crestani: Cómo saber qué responder a una oferta de negocios

Por Mauro Libi Crestani. En ocasiones algunas personas no ofrecen algún negocio que requiere una inversión de nuestra parte. Es algo común entre empresarios, emprendedores y personas comunes. ¿Qué hacer? 

Pues, analizar la propuesta con cuidado. 
No las descarte de una buena vez, pero tampoco se lance a lo loco a dar el “sí”.
Escuche primero el planteamiento cuidadosamente y formule todas las preguntas posibles pero sin manifestar un interés desmesurado. Hágalo con tranquilidad, que no lo noten ansioso.

Indague sobre la potencialidad y la rentabilidad.
Por ejemplo, para saber si es rentable compare los porcentajes de utilidad con lo que gana su dinero por intereses en el banco. Los márgenes de rentabilidad varían según la naturaleza del negocio. Asesórese al respecto.

Una cuestión que tiene que tener claro es si aspira a vivir de las ganancias que genere el negocio. Algo que suele suceder con los emprendedores que de esa inversión obtienen su salario y las ganancias le sirven para mejorar sus condiciones de vida. Vea entonces si los réditos le permitirán obtener dichos ingresos.


Si va a tener socios tienen que dejar sentado la política salarial y la distribución de las utilidades.

Investigue en todas las fuentes de información posible todos los datos de la actividad. ¿Es un negocio sustentable?

Algo vital es saber si el proponente del negocio tiene credibilidad, es confiable, es honorable.

De ser una franquicia, al respecto hay suficiente información en el mercado y los organismos especializados. Búsquela. 

Ahora consulte todo sobre el producto o servicio. No se canse de preguntar. Cuál es el nicho de mercado. Deben proporcionarle información precisa, no generalidades.

¿Cuál es el potencial de ventas del producto o servicio? Indague cual es el margen de ventas diarias, semanales, mensuales, anuales, por tipo de producto o servicio. No acepte proyecciones imprecisas.

Hay que conocer los márgenes de ganancias de cada venta, de cada producto, flujos de caja, mensuales del año, y total de los últimos cuatro años.

Ahora mida la rentabilidad. Hay herramientas que permiten hacerlo. Busque consejo y asesoría al respecto.

Toda esta información le permitirá tomar una decisión.

Sigueme @maurolibi12