Puede parecer contradictorio, pero la adversidad muchas veces es propicia para revisar a fondo nuestro negocio, reinventarlo y adaptarlo a nuevas condiciones, entornos y retos, de los cuales deberá salir fortalecido.
Es normal que en el transcurso de nuestro quehacer empresarial se presenten nubarrones, obstáculos imprevistos, situaciones amenazantes que nos hagan temer por la continuidad de nuestro emprendimiento, en el cual hemos invertido tiempo y dinero, y del cual depende la subsistencia de gran cantidad de colaboradores.
El conocimiento, la intuición y la confianza en nosotros mismos se ponen a prueba para tomar decisiones y llevar a cabo acciones que le hagan frente a esa turbulencia, sacando a flote la empresa y regresándola a una situación estable.
Ese es el momento propicio para transformarse y renovarse. Reducir, eliminar, crear, incorporar, fusionar y reforzar ciertas áreas del negocio, procesos, productos y servicios, hasta alcanzar un modelo de negocio que se adapte a esa nueva realidad.
Cada quien puede crear su plan de contingencia a la medida. Sin embargo, quiero destacar aquí algunas herramientas que pueden ayudar en estos casos:
1. Analiza la situación. Toma en cuenta los estados contables, indicadores externos, situación de la competencia, aspectos vulnerables, tendencias y amenazas, así como cambios decisivos en el entorno. Es necesario precisar dónde está el problema y con qué contamos para tomar decisiones.
2. Arriésgate a tomar decisiones. Tan pernicioso es decidir sin actuar, como paralizarte esperando a que todo mejore solo. Necesitamos habilidad y sentido de oportunidad para actuar a tiempo.
3. Apóyate en tus fortalezas. Representa la piedra angular sobre la cual fundamentarás tus reformas. Determinarlas bien te servirá para evaluar nuevas posibilidades, y ponerlas en práctica.
4. Diversifica el negocio. Aprovechando tus recursos y habilidades, puedes hacerle frente a un mercado restringido o a una dependencia absoluta de productos en declive, ofreciendo nuevos productos y servicios, relacionados con tu área.
5. Revisa tus comunicaciones. La comunicación 2.0 y el marketing digital nos permite, con asombrosa rapidez y precisión, llegar a nuestros clientes, segmentarlos, expandir nuestro radio de influencia, sumar a nuestra comunidad, lograr alianzas y conocerlos mejor e interactuar con ellos, en aras de una provechosa relación.