Por Mauro
Libi Crestani. Algunos lectores me han preguntado si todos los líderes
empresariales exitosos han sido siempre íconos del pensamiento positivo. Mi
opinión es que muchos de ellos sí lo han sido, aunque habrá otros que se
acercaron a sus objetivos profesionales con una actitud de "sí puedo
hacerlo".
Entonces, ¿El
poder del pensamiento positivo es la clave del éxito?
Me remito
a la investigación realizada por Barbara Fredrickson, una profesora de
psicología que ha escrito mucho acerca de la positividad. Esa investigación ya
la hemos tocado en otras entradas de este blog. Fredrickson encontró
que aquellos que poseen pensamientos positivos tienen una mayor capacidad para
tener en cuenta la nueva información. El pensamiento positivo mejora la
perspectiva y la capacidad de "conectar los puntos", lo que les
permite a las personas optimistas hacer frente a los problemas y obstáculos con
una actitud diferentes que por lo general les permite ganar.
La
realidad muestra que los pensadores positivos tienen más energía. Si usted
ve las cosas de manera positiva o negativamente, este rasgo de personalidad se
llama efecto disposicional. Los científicos han concluido que un efecto
disposicional positivo genera en las personas más energía y entusiasmo
que los negativos.
Positividad
construye resiliencia
Muy pocos
empresarios llegan al éxito con su primera idea o proyecto empresarial. A
menudo hay muchos fracasos y errores detrás de un negocio próspero. La buena
noticia es que los estudios han demostrado que la positividad puede ayudarle a
ser más resistente. Fredrickson afirma que "... las emociones positivas
ayudan a acelerar la recuperación de las emociones negativas," incluso
asegura que el pensamiento positivo se puede autogenerar.
El
pensamiento positivo mejora la toma de decisiones
Es algo
lógico que si estás en un estado de ánimo negativo, es menos probable que
puedas tomar decisiones que tengan un impacto positivo. Esto se pone de relieve
en el libro: Comprensión de la mente emprendedora, que
establece que "el pensamiento negativo de los empresarios se traduce en un
estado de ánimo negativo que podría llevarlos a tomar decisiones que
repercutan en la capacidad productiva de la empresa".
La
positividad es contagiosa ... Incluso en el lugar de trabajo
El mismo
libro también destaca que los empresarios con actitud positiva que tienen
contacto directo con sus clientes tienen más probabilidades de persuadirlos
para probar un nuevo producto. Esto es así porque la positividad es contagiosa.
Algunos
dicen que es debido a que el acto de ser positivo hacia otra persona libera la
oxitocina química en la sangre del receptor y otros afirman que se trata de que
nuestras 'neuronas espejo' causan acciones para replicar en aquellos que
interactúan con nosotros. En el caso de este último, vale la pena recordar que
si usted es un líder o gerente de equipo que esto también significa que las
palabras y las acciones negativas pueden ser tan infecciosa también.
El
pensamiento positivo no es nada sin la acción positiva
Una
investigación publicada en un libro editado en 2014 por Gabriele
Oettingen, asegura que sólo pensar positivamente acerca de los posibles
resultados positivos no es suficiente para que lo soñado o deseado se
haga realidad, hace falta para la materialización la acción positiva, que se
produce un condicionamiento de la energía.
En otras
palabras, el pensamiento positivo (o soñar despierto) por sí solo va a ser
ineficaz si no se produce la acción consciente.
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