Para el fundador de Casa Hogar “Al Fin”, Mauro Libi Crestani, este lugar fue creado bajo el concepto “familia”, lo que hace del proyecto muy particular, en comparación con otros que realizan una labor parecida.
En la actualidad, la quinta “Al Fin”, ubicada en La Guaira, estado Vargas, alberga 30 niños que son criados, formados y educado con el mayor amor posible.
“Aquí somos una familia, los niños no nos dicen tía o tío y profesor o profesora, porque la visión del señor Mauro Libi Crestani y su familia es que brindemos amor”, explica uno de los profesores, quien además aseguró que laborar en la fundación no es un trabajo común y corriente.
“Se requiere de mucha entrega, vocación y amor. Aquí ha llegado gente al conocer el proyecto se han enamorado y ahora invierten horas cada semana en pro del proyecto”, acotó José Pérez, coordinador docente de la fundación.
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