Cuando me pongo a observar el enorme potencial de nuestro
talento emergente, me remonto a mis
años de estudiante universitario, tiempo en el que mi cabeza era un hervidero
de ideas de negocio que nunca
pasaron de allí, porque, entre otras cosas, no me sentía preparado para dar el
siguiente paso.
Ese semillero de ideas ocurre constantemente en la mente
de todos, debutantes y conocedores. Ideas
innovadoras y prometedoras que llegan incluso a decirse más no a
desarrollarse, aunque tengan frente a ellos todo lo necesario para llevarlas a
cabo.
¿Por qué tantas ideas
geniales se pierden en el camino del
dicho al hecho?
Son muchas las variables que entran en juego para que un emprendedor pase del pensamiento a la acción con su proyecto. Yo lo resumiría en
conocimiento, pasión, planificación, recursos y cualidades particulares como el
manejo del riesgo y un toque de locura.
Sí, así lo refiere el docente de emprendedores, Edgardo
Donato cuando afirma: “Ser emprendedor es estar un poco loco, porque la locura
es lo que nos permite hacer cosas. (…) Del
dicho al hecho hay un emprendedor”.
Obviamente, no se trata de un tema que se pueda agotar en
un solo artículo, sin embargo dejo aquí algunos tips para que esa transición del
dicho al hecho ocurra y genere un nuevo emprendimiento exitoso.
- · Investiga el sector donde quieres incursionar. Averigua los pormenores de los productos y servicios que actualmente se ofrecen, las reacciones del público, los detalles de la competencia, las debilidades y oportunidades existentes para que procedas a ofrecer algo innovador.
- · Diseña tu plan de negocio. Esto te moverá a la acción ya que tienes una carta de ruta con la cual comenzar. Se trata del documento donde determinas qué, cómo y cuándo desarrollar tu idea de negocio que también te ayudará a captar talento y financiamiento si fuera el caso.
- · Rodéate de gente positiva que te estimule a avanzar. Esa que no pone tantas excusas para actuar y que siempre vea nuevas posibilidades.
- · Apóyate en el marketing digital y en la tecnología. Es el momento estelar de los emprendedores que aprovechan los recursos y ventajas que ofrece esta dupla para darse a conocer, promocionarse, interactuar con los clientes y abrirse a nuevos mercados.
- · Crea alianzas estratégicas que te complementen y fortalezcan tu presencia en el mercado.
Recuerda que una idea sin plan no es más que un deseo y
que el gran paso de un emprendedor está en su motivación y arrojo para
controlar los riesgos y pasar a la acción.