Mauro Libi: ¿Emprendimientos reinventados? El éxito en plena pandemia

Por Mauro Libi Crestani

La realidad que ha dejado el paso de la pandemia es dura, ha sido una prueba de fuego para las empresas, ya que muchas se han visto en la obligación de cerrar sus puertas, por lo que autoridades de algunos países latinoamericanos han anunciado medidas de ayuda económica para las pymes, por la paralización de sus actividades que ha generado la cuarentena.

Sin embargo, algunas empresas han logrado reinventarse en medio de la crisis, convirtiéndose en parte de la solución para que la comunidad puede sobrellevar la situación, ya que proveen productos y servicios esenciales, además de distracción, como las siguientes siete pymes:

1.- Fiestas online: En Colombia, a Sebastián González se le ocurrió crear fiestas con Dj, bailarinas y un animador, todo realizado por Zoom, una herramienta de videoconferencia online. Cuando empezaron estos eventos, a finales de marzo, eran gratuitos y entraron hasta 500 personas pero ahora, a los hombres se les cobra una entrada mientras que las mujeres entran gratis, como normalmente sucede en las discotecas, ya que esta novedosa estrategia es una opción para que los jóvenes pasen el rato y hagan nuevos amigos.

2.- Frutas en alta demanda: Natalia Peris tuvo que cerrar las puertas de su pequeña tienda de alimentos y  envasados orgánicos por la cuarentena, esto la llevó a iniciar las ventas con entregas a domicilio, valiéndose de la ventaja de ser un negocio pequeño, lo que le permite ofrecer atención personalizada y rapidez en el servicio, además, debido al acelerado crecimiento tuvo que contratar a dos empleados más.

3.- Clases de karate online: El venezolano Antonio Díaz, karateca y bicampeón mundial, comenzó a dar clases mediante la plataforma online, Zoom, junto a dos entrenadores de su academia ubicada en Caracas. A pesar de las dificultades como la deficiencia del internet, y el hecho de dar indicaciones y corregir posturas de sus estudiantes a través de una pantalla, han logrado llegar a muchas personas.

4. Mascarillas de cobre: Antes del Covid-19, la diseñadora chilena Luz Briceño creaba textiles antibacterianos para usar en quirófanos, pero a raíz de la cuarentena empezó a fabricar mascarillas con telas elaboradas con nanopartículas de cobre, ya que es un material antimicrobiano. Estos tapabocas son probados y avalados por virólogos y epidemiólogos.

5. Panes mediante una App: Una aplicación móvil comprada hace cinco años pero que no había dado frutos, fue la que salvó el negocio del argentino Antonio Bertasio, llamado Quiero Pannet. La app funciona con el código de área de la zona, si el consumidor se encuentra en el radio, de inmediato le aparece el catálogo de los productos congelados, que luego de la entrega, podrán hornear fácilmente en sus hogares.

6.- Escudos de protección: La arquitecta venezolana Francis Murillo trabaja con cortes láser e impresión 3D, y a través de su empresa 2MD Láser comenzó a realizar viseras protectoras para personal médico, tras el surgimiento de la pandemia, por lo que ha recibido un volumen inesperado de donaciones de acetato y tereftalato de polietileno (PET), por parte de empresas y particulares, con lo que ha fabricado más de 8 mil piezas para hospitales.

Al principio toda la producción fue donada, sin embargo, ahora Murillo recibe solicitudes de presupuesto, y está iniciando un inventario para aplicar un nuevo esquema de compra-donación, para que al comprar una visera se pueda donar otra.