viernes, 31 de julio de 2020

Mauro Libi: 2021 y la era digital, los empleos más demandados



Por Mauro Libi Crestani

Si algo nos ha enseñado esta crisis mundial, es que nada volverá a ser igual, en ningún aspecto, por lo que el campo laboral está cambiando y abriéndole paso al crecimiento del entorno digital.

Esto es un punto positivo dentro de la difícil situación por la que estamos atravesando, ya que surgen nuevas oportunidades laborales que exigirán un perfil profesional con una formación académica extensa en el área de las Tecnologías de la Información y la Comunicación, mejor conocida como TIC.

Según el portal especializado en empleo, Jobatus, el Director Digital o Chief Digital Officer, será el profesional digital más demandado en 2021, debido al crecimiento de la actividad económica basada en la tecnología.

El sector TIC está multiplicando la productividad de las economías, captando cada vez más inversiones y generando nuevas empresas y puestos de trabajo, enfocados en los servicios, que va creciendo a un ritmo sostenido.  

Sin embargo, este perfil de candidato no es muy común, ya que en el estudio se explica que alrededor del 70% de los entrevistados por esas compañías, no posee los conocimientos exigidos, por lo que continúan en la búsqueda.  

Los puestos más demandados son aquellos relacionados con los negocios digitales, ciberseguridad, inteligencia artificial y el Big Data, y los profesionales digitales más solicitados en 2021 serán:

1.- Director Digital o Chief Digital Officer: Es quien estudia a las empresas para transformarlas en negocios digitales competentes. Es especialista en modelos digitales y posee estudios del ámbito tecnológico.

2.- Especialista en Inteligencia Artificial: Se encarga de diseñar piezas u objetos artificiales, con programas informáticos, que solucionen de forma independiente problemas del entorno.

3.- Científico de datos (Data Scientist): También es llamado “especialista en Big Data”, organiza y transforma en conocimiento, todos los datos que posee una empresa para extraer conclusiones y efectuar proyecciones y predicciones de comportamientos basadas en dichos datos.

4.- Director Informático (IT Director): Este controla que el departamento de informática de una empresa funcione correctamente y sin incidencias, es decir, debe supervisar los proyectos técnicos y comprobar que cumplen con los objetivos de la, y recuperar y proteger los sistemas y procesos tecnológicos.

5.- Gerente de éxito con el cliente (Customer Success Manager): Debe mantener una relación atenta y continuada con sus clientes y solventar las incidencias que hayan tenido con su producto o servicio, además es el máximo responsable de ejecutar una estrategia, a fin superar las expectativas del cliente y lograr su fidelización.

6.- Jefe de ciberseguridad (Chief Information Security Officer): Se encarga de proteger toda la información que posea una organización, de posibles ataques informáticos, para eso debe generar protocolos de seguridad, privacidad de los datos y supervisar la ejecución de las normas de seguridad.

7.- Responsable de comercio electrónico (Ecommerce Manager): Es quien gestiona, supervisa y coordina todos los aspectos relacionados con la plataforma de comercio electrónico de una empresa.

Un consejo para las nuevas generaciones que les gusta esta área de la tecnología y la informática, identifiquen sus habilidades y especialícense para que crezcan y se desarrollen como profesionales en el futuro inmediato.

 


Mauro Libi: ¿Cuál es el reto de las empresas tras la pandemia?



Por Mauro Libi Crestani

Los embates de la pandemia son innegables, son muchas las empresas que deben enfrentar las consecuencias de la paralización absoluta de sus actividades, además de buscar la manera de resistir y sobrevivir a esta difícil situación.

Es el caso del sector turismo, restaurantes, y servicios de transporte, entre otros, ya que actualmente debemos quedarnos en casa para no tener contacto con desconocidos, y así evitar correr el riesgo de contraer el virus.

Pero ¿Qué tienen en común estos tres rubros? La pérdida de la confianza del consumidor. En algunos casos, provocada por las propias empresas, pero en su mayoría como consecuencia de una de las peores crisis económicas de los últimos tiempos.

Podemos decir que la confianza es la esperanza que tenemos en que algo funcione de una manera determinada, es algo genuino en nuestras relaciones diarias, como una expectativa hacia las personas, empresas u organizaciones, de que deben cumplir sus promesas y ser responsables con su entorno.

Según algunas investigaciones, la presencia de la confianza conlleva resultados positivos, esto genera que las comunidades que tienen este sentimiento desarrollado, estén mejor preparadas ante una crisis y tengan un crecimiento económico más fuerte, una mayor innovación, más estabilidad, y por su puesto mejores resultados.

Por ejemplo, durante esta crisis, es esencial aprovechar la fuente de confianza para difundir información crítica, mantener la tranquilidad y contener la enfermedad.

Por su parte, las empresas se relacionan con diferentes grupos de interés, cada uno con distintas preocupaciones: clientes, comunidades, empleados, proveedores o accionistas, por lo que han debido enfrentar el reto de ser empáticas con cada uno de sus grupos, considerando sus necesidades.

Para esto existen cuatro dimensiones de la confianza, que son la física, emocional, financiera y digital, por lo que deben elaborar estrategias en cada uno de estos tópicos y comunicarlas oportunamente, y sobre todo con honestidad, ya que la comunicación, sin duda, es el mejor generador de confianza, siempre y cuando sea transparente, con la verdad, y se base en la detección y satisfacción de las necesidades y expectativas de cada uno de sus intereses.

En conclusión, de ahora en adelante las empresas deben enfocarse en recuperar la confianza de sus consumidores, en aras de mantenerse, pero también la de sus empleados para poder seguir contando son su mejor esfuerzo y así ofrecer un producto o servicio de calidad que les permita continuar creciendo en un futuro cercano.

 


jueves, 23 de julio de 2020

¿Qué tiene que ver Mauro Libi con la ciberseguridad?



Por Mauro Libi Crestani

Con la llegada de la pandemia del Covid-19, la solución perfecta para que muchas empresas pudieran continuar produciendo fue trasladar el trabajo a la casa, además de funcionar como una medida sanitaria para evitar la propagación del virus.

Esta estrategia conlleva una serie de cambios en cuanto a la seguridad que se debe establecer para minimizar los riesgos, tanto para la compañía como para los trabajadores.

Una de las empresas más importantes de ciberseguridad, Kaspersky Lab, explicó que el riesgo de robo de datos durante el trabajo remoto es algo factible, ya que los empleados trabajan con un proveedor de servicio de internet, del cual se desconoce de sus filtros de seguridad.

Asimismo, un análisis llevado a cabo junto a la consultora de estudios de mercado CORPA, señaló que el 25% de los latinoamericanos no cuenta con una computadora portátil destinada solo para trabajar, por lo que es utilizada también para manejar todo tipo de información, incluyendo sus redes sociales.

En el caso de sí tenerla, el 30% de ellos se conecta a una red pública de internet cuando está fuera de la oficina, por lo que existe muchos más riesgo de sufrir un hackeo, puesto que solo el 8% de estas personas se conecta a una red virtual privada (VPN).

Esta es una de las medidas más importantes para evitar el robo de datos, ya que al conectarse a una VPN de confianza, se establece un canal de comunicación seguro entre la estación de trabajo y al infraestructura de la empresa; también es recomendable que por parte de la empresa se le prohíba a los empleados el conectarse a redes externas mientras estén usando los recursos corporativos.  

Por otra parte, se aconseja cambiar la contraseña del Wi-Fi, ya que así se establece un nivel de seguridad más fuerte, además de que proporcionan mayor confianza a los usuarios.

Con respecto al uso de una computadora familiar, es necesario crear un nuevo usuario exclusivo para uso laboral, y evitar que tenga privilegios de administrador. Otro de los posibles ataques es la estafa con los correos electrónicos, también conocidos como phishing, ya que al no tener contacto físico con las personas hace difícil detectar si estos mensajes buscan sacar datos personales o de la empresa como tal, por lo que es mejor usar exclusivamente el correo corporativo.

Es así como los documentos compartidos deben ser configurados correctamente, ya que en caso de hacerlo de manera inapropiada, podrían ser fáciles de encontrar a partir de búsquedas sencillas y convertirse en una fuente de filtración, igualmente pasa con los datos almacenados en la nube.

Adicionalmente, es necesario tener los equipos y aplicaciones actualizadas y respaldadas con copias de seguridad en discos externos, que no deben estar conectados a las computadoras las 24 horas, sino solo en el momento en que se transferir la información.

Y para finalizar, es importante que los empleados cuenten con un software antivirus en sus equipos, aunque sea una versión gratuita, a fin de estar más blindados contra cualquier intento de hackeo.