Por Mauro Libi Crestani
Si
algo nos ha demostrado esta crisis provocada por la pandemia del Covid-19, ha
sido que debemos cambiar, transformar nuestro estilo de vida hacia una versión
más amigable con la naturaleza, es
decir, debemos evitar el impacto negativo que generamos en nuestro planeta.
Durante
estos días de cuarentena quedó en evidencia que la mano del ser humano ha sido destructiva a lo
largo del tiempo, y mientras hemos estado confinados en nuestras casas, la
tierra se ha regenerado, lo que nos deja un claro mensaje: debemos cuidarla.
En
este sentido, una de las cosas que debemos implementar es la producción ecoamigable, también
conocida como orgánica, que sugiere un sistema de gestión y producción
agroalimentaria con las mejores prácticas ambientales a fin de preservar la diversidad de especies
tanto animales como vegetales, incluyendo los recursos naturales.
Esto
significa que durante el proceso de fertilización de la tierra, siembra,
crecimiento, maduración y cosecha, no se deben utilizar químicos, salvo los
necesarios para evitar las plagas, sin embargo, deben usarse los menos
peligrosos del mercado.
Uno
de los beneficios de este tipo de producción, son los frutos con un alto nivel
de pureza en su naturaleza, que
puede ser percibido por los consumidores, además de que deben llevar una
identificación especial que señale esto en su empaque.
Algunos
de los alimentos que se pueden elaborar bajo la producción ecoamigable son los cereales, leguminosas grano, papas,
remolachas, hortalizas, y algunas frutas, entre otros.
Gracias
a los buenos resultados que ha dado esta modalidad, también se ha aplicado en
la ganadería, donde son escogidos ejemplares de razas adecuadas, y se utilizan métodos
naturales, aunque se permite la inseminación artificial siempre que no sea
inducida mediante tratamientos hormonales.
Una
regla determinante en la Producción
ecoamigable aplicada en la ganadería, es que no está permitida la clonación
o transferencia de embriones.
El
objetivo es lograr que cada proceso de producción sea lo más natural posible,
menos invasivo y con menos efectos dañinos a fin de preservar el medioambiente y alargar la vida tanto del ser humano como de nuestro planeta.