Por Mauro Libi Crestani
Si tienes dudas sobre tu habilidad para comunicarte es porque te sientes inseguro, sobre
todo a la hora de hablar delante de un grupo de personas, y es que comunicarse es
mucho más que una buena cualidad: es un requisito para establecer conexiones significativas que son la
base de cualquier negocio.
Tener ciertas destrezas
para comunicarte te ayudará a inspirar más respeto, confianza y a resolver los
problemas con mayor eficacia, así como tomar decisiones asertivas rápidamente. Para
lograrlo trabaja en las siguientes:
Manejo de emociones. Tener inteligencia emocional para impedir que estas te
dominen es una de las principales claves para ser un buen comunicador. No se puede establecer una conversación con una persona hecho un manojo de nervios o que se
irrita a la menor provocación.
Capacidad de enfoque. Si quieres ser un buen comunicador, ya sea para hablar o
para recibir información, necesitas dejar de ser multitasking y poder concentrarte
en quienes están interactuando contigo.
Aprender a escuchar. Generalmente, las personas se enfocan en lo que van a
decir y en hacerse escuchar, pero muy pocas veces se enfocan en escuchar. Si
quieres ser un buen comunicador, no te conviertas en ese tipo de persona,
presta atención a lo que dicen los
demás.
Evitar hacer juicios. Para poder entender a una persona, debes dejar los
juicios a un lado, mantén la mente abierta y no juzgues a las personas, en
especial si no tienes los elementos necesarios para formarte una opinión.
Ofrecer
retroalimentación. Esto se trata de
escuchar lo que alguien más te está diciendo, tener empatía y hacerle saber, de alguna forma, que te interesa. Para
profundizar la conversación puedes hacer preguntas, tocar puntos importantes para
tu interlocutor, además de ofrecer algún consejo, si es necesario.
De esta manera podrás crear mejores conexiones con quienes
te rodean, ya sean empleados, socios o jefes, tus relaciones sufrirán un cambio positivo, que incluso te ayudarán a
abrir puertas.