Por
Mauro Libi Crestani
La pandemia ha dejado una serie de consecuencias en las empresas, como
la baja en las ventas y la pérdida de personal, entre otras, sin embargo,
existe una tendencia creciente en Latinoamérica
que podría ayudar a optimizar procesos para su recuperación.
Se trata del Business Process Outsourcing (BPO) o externalización de procesos de
negocio, que permite a las empresas expandir sus operaciones a nuevos
horizontes de negocios, para satisfacer a los clientes en un entorno altamente
competitivo.
Esta tercerización inteligente ha
crecido a ritmos superiores que los de la economía, debido a la tendencia de
externalizar diferentes actividades, a pesar de que aún existen barreras
culturales y mitos que desechar, como la desconfianza a contratar servicios
externos y el temor a perder el control de la empresa.
Esta tendencia se basa en la filosofía de “haz lo que sabes hacer mejor
y te aporta más valor, y deja todo lo demás en manos de un aliado que lo sepa
hacer mejor que tu”, que resulta beneficioso para ambas partes, siempre y
cuando se establezcan claramente los términos y límites del contrato.
El BPO es altamente funcional
para llevar los servicios corporativos enfocados en administración, finanzas y
recursos humanos, enfocándose en el reclutamiento, selección de personal y
estudios de confiabilidad, para atender prioridades operacionales.
La compañía Invest in Bogotá,
asegura que después de Brasil, México es el mayor mercado latinoamericano en Business Process Outsourcing aunque
gracias a una combinación de ventajas competitivas, como la disponibilidad,
calidad y costo de mano de obra, conectividad, dinámicas de mercado, y una posición
estratégica privilegiada, Colombia también se ha posicionado como uno de los
mejores entornos de Latinoamérica para la prestación de estos servicios.
De hecho, esta modalidad de tercerización ha generado en ese país,
más de 230 mil empleos directos y un crecimiento promedio anual del 6% en los
últimos seis años, además, la Asociación Colombiana de BPO estima que en los
próximos cuatro años, estos servicios aportarían 100 mil nuevos empleos,
principalmente para los jóvenes, situación que beneficiará a la economía nacional.
Asimismo, se considera la
posibilidad de crear alianzas estratégicas con empresas mexicanas, ya que están
demostrando su adaptación a estos nuevos esquemas, que junto a Colombia podrían
evolucionar y posicionar su oferta de valor.
Si estás pensando en optar
por esta herramienta para levantar
tu negocio, es necesario que evalúes bien el mercado de tercerización, ya que
actualmente se muestra muy extenso pero en realidad son pocas las empresas
capaces de ofrecer soluciones integrales,
incluyendo la gestión de ofertas de empleo, automatización de procesos y
administración de nómina, especializados para pequeñas y medianas empresas.
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