Por: Mauro Libi Crestani
Si quieres
llevar a cabo un estudio económico y además, calcular la inversión inicial para tu emprendimiento,
es necesario que determines los activos
con que cuentas.
Sin
embargo, es necesario entender bien lo que es un activo, y lo podrás reconocer
como cualquier bien o derecho de
propiedad perteneciente a la empresa,
de los que se espera obtener beneficios económicos.
Estos
activos pueden ser corrientes, como el activo circulante (recursos necesarios para poner en funcionamiento el proyecto) o no
corrientes (inversiones a largo plazo que duran más de un ejercicio fiscal).
La
inversión en activos fijos puede ser tangible, como la infraestructura, maquinaria y equipo, así como los costos de
operaciones, sin los cuales no podríamos comenzar a producir.
Por
otra parte, están los activos intangibles, que aportan valor al emprendimiento,
como los derechos y permisos,
estudios de mercado, punto comercial, convenios
con proveedores, prácticas sustentables y hasta la reputación generada por la
aceptación del público.
Así
que computadoras, vehículos, equipo humano especializado, facilidad de acceso a
los insumos, procesos innovadores, productos
de avanzada, buenas relaciones, planes estratégicos de marketing digital y
comunicación, pueden hacer la diferencia para alcanzar el éxito.
Por
experiencia sé que si te esfuerzas sumando todos los conocimientos necesarios,
podrás darle vida a tu proyecto.