Por: Mauro Libi
Crestani
Incluir cereales como la avena en nuestra alimentación,
es importante, sobre todo cuando estamos iniciando nuevas rutinas de ejercicios o quizás estamos pasando de
una etapa extremadamente sedentaria a una más activa y deportiva.
Para aumentar la ingesta calórica, es necesario que tomemos
al menos 40 gramos de avena, es decir, media taza del cereal, ya que proveerá al
menos 154 kilo/calorías.
Todos sabemos que la fibra en el organismo facilita el proceso de digestión, por ello es tan
importan incluir alimentos ricos en este elemento; sobre todo para potenciar la
eliminación toxinas.
Vale destacar que, ante problemas de ansiedad, la fibra
que aporta la avena, es un excelente suplemento,
ya que producen sensación de llenura. También es recomendable como un
complemento alimenticio; por eso existen barras compuestas de avena, que cumplen
esta función.
Es importante acompañar el consumo de avena con el ejercicio;
ambas son realmente efectivas para evitar enfermedades de tipo coronarias e
hipertensivas.
Asimismo, los nutricionistas
indican que acompañar el yogur natural y sin azúcar, con algunas cucharadas de
avena es un buen desayuno para una persona que saldrá en pocos minutos a
ejercitarse.
Ingerir agua, unos
ocho vasos, con algunas cucharadas de avena en hojuelas, es otra forma de
ayudar al organismo a mantener su equilibrio. Evitando siempre el consumo de
azúcar.
El consumo de avena y leche, también previene el aumento
del colesterol. Sin duda, existen muchos otros alimentos que benefician el
cuerpo, pero la avena aporta una gran cantidad de nutrientes al cuerpo.
Para iniciar una rutina de ejercicio es necesario que
contactes a un entrenador profesional para que te recomiende las rutinas
adecuadas según tu edad, peso y contextura, así podrás lograr la figura que
deseas y mantenerte saludable.