Por
Mauro Libi Crestani
Durante estos tiempos tan
convulsionados debemos analizar la situación de nuestras empresas desde todo punto de vista, es decir, también debemos ser
capaces de ver las cosas buenas que nos está dejando esta crisis.
Actualmente, tenemos grandes oportunidades y cosas por aprender,
mejorar, adoptar, reflexionar y ajustar. Las dificultades son necesarias porque nos ayudan a crecer y a
convertirnos en mejores personas y empresarios.
Es por esto que debemos tomar
en cuenta estos ocho beneficios que
nos deja esta situación:
1.- Nuevas líneas de negocio: Muchas empresas han diseñado nuevos
productos o adaptado su oferta actual, no solo para cumplir con las necesidades
de sus clientes durante el confinamiento sino también para adaptarse a una
nueva realidad de consumo, así como lo estamos haciendo con Avelina. Esto es
bueno porque representará nuevas fuentes de ingreso a futuro para el negocio.
2.- Más adaptación tecnológica: Quienes se negaban a utilizar
herramientas tecnológicas, ahora deben hacerlo, sin importar la edad o el nivel
socio económico que tengan, obligados por el confinamiento y la dificultad para
adquirir lo que necesiten, por lo que esto se traduce en más clientes y
ganancias, sobre todo para las empresas que están al día con las redes sociales
y sus tendencias.
3.- Nos obliga a estar online: Aunque no lo crean, muchas compañías
solo hasta ahora están prestando atención al mundo online. Desde la
actualización y optimización de su página web hasta tener una presencia más
activa en redes sociales, esta ha sido la oportunidad para fortalecerse en la
web.
4.- Crece la creatividad: Los tiempos de crisis hacen surgir las
mejores ideas, lo que generado que muchos negocios hayan empezado a explorar
nuevas maneras de hacer las cosas, pasando por actualizar sus empaques, las
ventas, los productos, y la comunicación.
5.- Crear nuevos canales: Esto se ha evidenciado con el crecimiento que
han tenido los diversos canales de ventas online específicamente, lo que por
supuesto representa beneficios para las empresas.
6.- Mayor conciencia ambiental: Indiscutiblemente ha aumentado la
concientización de los consumidores, hacia los productos con una producción más
limpia, que sea amigable con la naturaleza, como el ahorro de energía y la
utilización de materias primas renovables.
Estos agregados le aportan valor a tu negocio.
7.- Reconocimiento de la responsabilidad social: Antes de la crisis la
responsabilidad social no era tan apreciada por los consumidores como lo es
ahora, ya que cada vez son más conscientes del impacto positivo de las empresas
en las comunidades con las que interactúan.
8.- Adaptación al teletrabajo: Esta modalidad de trabajo llegó para
quedarse y ya todos nos estamos acostumbrando, hemos aprendido a manejar los
procesos de manera remota y que los encuentros sean por videoconferencia, y lo
mejor de todo es que la mayoría de los negocios continúan marchando bien.
Estos cambios no son positivos solo para las compañías y los clientes
sino también para sus empleados, ya que si el negocio lleva un buen ritmo,
generando ingresos y crecimiento, todos nos veremos beneficiados. El objetivo
es adaptarnos y mirar hacia el futuro,
juntos.