Por Mauro Libi Crestani
Todos los que
estamos en el mundo de los negocios,
lo hacemos por varias razones, entre las que destaca el vender mucho, crecer y
ser una referencia en el mercado.
Sin embargo, a veces, nos enfocamos solo en vender, sin pensar en lo que realmente desea nuestro cliente para poder comprar. Cuando nos dedicamos a identificar estos factores, debemos sumar uno que es muy importante, se trata del placer.
Esto es algo que debes tomar en cuenta para aumentar tus ventas, sea cual sea el producto o servicio que ofreces. Y la manera de hacerlo, es otorgando un bonus, dando más de lo que la persona esperaba recibir o mejorando tu atención al cliente, con el fin de aumentar la satisfacción.
Entonces, cuando consigas la fórmula para darle al cliente ideal, lo que está buscando, más ese placer que no tendrá con otro producto o servicio, entenderás que el trabajo está hecho, ya que, además de lograr atraer a más compradores, podrás quedarte en su mente.
La experiencia que brindas quedará anclada en su subconsciente, permitiendo que te recuerde e incluso se cree la necesidad de obtener tu producto nuevamente. De esta manera, también estarás impulsando una de las mejores estrategias publicitarias, el boca a boca, ya que un cliente satisfecho siempre te recomendará con su círculo más cercano, provocando que otras personas te compren.